La infanta Cristina y el ministro de Cultura inauguraron ayer el Museo Nacional de Arqueología Subacuática
NAZARENA BALAGUER
El Museo Nacional de Arqueología Submarina, Arqua, recibirá entre ochenta y cien mil visitantes al año, según las previsiones del Ministerio de Cultura. La infanta Cristina de Borbón y el ministro de Cultura, César Antonio Molina, inauguraron ayer estas instalaciones construidas para ser un referente en la investigación y protección del patrimonio sumergido.
El acto congregó a poco más de un centenar de personas entre las que se encontraban el delegado del Gobierno, Rafael González Tovar y la diputada socialista, Sara García, quienes 'escoltaron' a Doña Cristina a la sala en la que tuvo lugar la inauguración, la Alcaldesa de Cartagena, Pilar Barreiro, el director del Arqua, Rafael Azuar, el arquitecto Guillermo Vázquez Consuegra, el consejero de Cultura, Pedro Alberto Cruz, y la corporación municipal cartagenera al completo.
Molina comparó el museo con la singladura de una nave a la que todavía le queda por navegar una larga travesía. "En este acto se hará la botadura de una nave que lleva la firma en el casco de Vázquez Consuegra. Se trata de un edificio de vanguardia que lleva un equipamento de última generación con la museografía de Boros Micka", señaló.
El ministro recordó que ayer se firmaba el protocolo para la constitución de un Patronato para la gestión del museo en el que estarán representadas las administraciones autonómica y local, además de instituciones culturales y arqueológicas. El Arqua ha nacido "con vocación internacional", dijo Molina, quien recitó de memoria unos versos del poeta cartagenero José María Álvarez: "Las viejas playas/ a las que siempre te lleva/otro latido del mundo".
Protección contra el pirateo. La protección del patrimonio subacuático y su defensa son uno de los objetivos de este museo, recordó el ministro de Cultura. "El ministerio aportará 1,4 millones de euros para la defensa jurídica de pecios que pertenecen a nuestro país", dijo Molina, en clara referencia al galeón 'La Mercedes', expoliado en aguas del Estrecho en 2006 por la empresa cazatesoros Odyssey.
Si el juzgado de Florida da la razón al gobierno español, que ha reclamado este tesoro, parte de estas piezas de valor incalculable irán a parar al Arqua.
Además, el museo cuenta con un presupuesto estimado de dos millones de euros para el año 2009.
En la puesta en marcha de "este extraordinario campamento", según la descripción de Molina, han colaborado con su apoyo muchas instituciones como es el caso de varias universidades españolas y de países como Francia, Italia, Grecia, Francia, Turquía, Israel, Estados Unidos o Malta.
Molina también recordó la colaboración de la Fundación Aurora Trust, que desde hace dos años colabora con el Museo Nacional de Arqueología Subacuática para llevar a cabo prospecciones en la bahía de Cartagena. "Hemos avanzado mucho -dijo el ministro- pero todavía nos queda mucho por andar". El museo contará también con el Centro de Investigaciones Subacuáticas, que se construirá frente al edificio principal.
Al finalizar el discurso de César Antonio Molina, la infanta Cristina corrió la cortina que cubría la placa conmemorativa de la inauguración de este museo, entre los aplausos del público.
Después, la comitiva recorrió las dos salas de exposiciones del Arqua, haciendo pausas en las salas principales.
Doña Cristina atendió atentamente las explicaciones de Azuar sobre las piezas de nuestro patrimonio sumergido y la metodología que se ha empleado para su restauración y conservación.
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