Miguel Ángel Orellana
El presidente restó importancia al hecho de que los ciudadanos no tengan ni la menor idea de quién es quién en su Consejo de Ministros. En su partido siguen viéndolo como un problema.
21 de diciembre de 2008
MINISTRAS INVISIBLES
Beatriz Corredor, ministra de Vivienda, junto a Cristina Garmendia y Bibiana Aído, responsablesde las carteras de Ciencia e Innovación e Igualdad,son un ejemplo de un desdibujado Consejo de Ministros.
"Con la crisis, hay un protagonismo muy directo de los jefes de Gobierno y eso hace que el Ejecutivo quede en un segundo plano y relegado. Ante la magnitud de la crisis toca a los presidentes ponernos al frente, dar la cara todo lo posible, dirigir, exigir y liderar. Eso hace que queden en un segundo plano los ministros. (…) El Gobierno forma un equipo coherente" .
Así se expresaba el pasado jueves el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, en su entrevista concedida a Iñaki Gabilondo en Cuatro.
Otra cosa es que sus palabras hayan conseguido convencer a dirigentes del PSOE que, según ha podido comprobar El Semanal Digital, ven en privado preocupantes déficits en el Gabinete. Cargos socialistas admiten – y lamentan – que sólo el presidente del Gobierno haya logrado capitalizar la gestión gubernamental. El resto "conecta poco, o no conecta", aseguran. El equipo del Palacio de La Moncloa se ha reforzado en esta segunda legislatura y ha conseguido potenciar la figura de Zapatero. Se ha logrado un fuerte presidencialismo, desdibujando al resto del Consejo de Ministros.
Esto es analizado tanto en positivo como en negativo por los dirigentes consultados por este periódico. Por un lado se admite que es necesario que la figura del presidente del Gobierno se potencie al máximo en estos tiempos de vicisitudes. Pero, por otro, muchos socialistas se preguntan qué pasa con el resto del Ejecutivo, con el resto de los ministros al entender que se están quedando al margen. Las titulares de Vivienda, Beatriz Corredor, Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, e Igualdad, Bibiana Aído, son sólo tres ejemplos recurrentes de miembros del Gobierno "invisibles".
Tampoco salen mejor parados los responsables de Sanidad, Bernat Soria, Cultura, César Antonio Molina, Educación, Mercedes Cabrera, o Administraciones Públicas, Elena Salgado. Los ciudadanos españoles no tienen ni la menor idea de quienes son y a qué dedican el tiempo. Por ello, los socialistas consultados mantienen que Zapatero debería darles un "toque" para que espabilen y solucionen su problema de imagen. "El Gobierno tiene un problema de imagen y sus miembros deberían ponerse a diseñar apuestas para que realmente se les vea", reconocen con inquietud esas mismas fuentes.
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