Costas restaurará la única torre defensiva que se conserva en el litoral cartagenero 650.000 euros invertirá la Demarcación de Costas en una actuación integral que incluye obras en los accesos, en la fachada del
edificio y en su interior. También se eliminará un vertedero incontrolado
edificio y en su interior. También se eliminará un vertedero incontrolado
Por Eduardo Ribelles
La Torre de Santa Elena, elemento defensivo y de vigilancia costera, desafectado por el Ministerio de Defensa y de indudable valor arquitectónico, será restaurado, así como su entorno, gracias a un plan de obras que supondrá la inversión de 650.000 euros a lo largo del próximo año 2009, según informaron fuente de la Demarcación de Costas, organismo que es el actual titularidad de su propiedad en nombre del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino, en la Región de Murcia, que es el actual titular de su propiedad.
El plan de actuación engloba diversas actuaciones destinadas a convertir esta torre militar de vigía en un enclave visitable que proporcione un paseo desde La Azohía y un lugar de esparcimiento y vista del paisaje marítimo circundante.
Se hará una adecuación del sendero de acceso, a la torre, que se mantendrá como peatonal, con pilotes y barreras móviles para flanquear el paso sólo a los coches y camiones autorizados, según explicó Francisco Peñalver, arquitecto encargado de la obra en la Demarcación de Costas.
El sendero, convenientemente acondicionado conducirá a la entrada de la torre, en la que está previsto instalar una nueva puerta. La adecuación de la fachada incluirá actuaciones tanto en el interior como en el exterior.
Por lo que respecta a la fachada, se ha decidido recuperarla tal y como era inicialmente, utilizando piedra y, sobre todo, material de recubrimiento en cal blanca, que en su mayor parte se ha desprendido. “Queremos ser fieles a la fisonomía original de la tierra, que además ha aguantado muchos años con ella”, según explicó Peñalver. Asimismo, se recuperará la escalera metálica del exterior del edificio.
Escalera de caracol
Por lo que respecta a la adecuación interior, se va a reacondicionar la escalera interior de caracol que brinda acceso a la parte superior de la torre, con ventanas-mirador al exterior. También se ha previsto recuperar la caseta anexa. El edificio brinda unas posibilidad de reutilización que están siendo estudiadas, “sin embargo, todavía no se ha tomado una decisión al respecto”.
De momento, se quiere recuperar este elemento por su valor arquitectónico y paisajístico y ya se verá si posteriormente se le da una utilidad más concreta”, apuntó Peñalver.
Por lo que respecta al entorno, la actuación más importante consistirá en la eliminación de un vertedero incontrolado de basuras y residuos que se ha ido formando, por el abandono de estas instalaciones, en los últimos años.
Única torre costera
La Torre de Santa Elena forma parte del grupo de edificaciones construidas entre los siglos XVI y XVII, a lo largo de la costa de la Región de Murcia, para alertar de la presencia de corsarios berberiscos, cuyas incursiones hacían necesario mantenerse alerta a todas las localidades costeras de Almería, Murc,ia y Alicante. Desde sus 70 metros de altura, esta torre fue una de las pocas cuya fisonomía permitió emplazar armamento defensivo y es, de hecho, la única que se mantiene en pie tan cerca de la costa.
La estructura hexagonal fue erigida con sillares de piedra, con cobertura de mampostería blanca. Una escalera de caracol interior permitía llegar a los diversos niveles superiores. Ya durante el siglo pasado se construyó una escalera metálica en el exterior. Tras décadas de abandono, el Ministerio de Defensa decidió traspasar hace algunos años la titularidad al de Medio Ambiente, que ahora abordará la restauración del edificio.
Los vecinos piden la cesión de uso cultural del edificio
El presidente de la Asociación de Vecinos de La Azohía, Juan José heredia, explicó que está puntualmente informado del proyecto de adecuación de la Torre de Santa Elena y de su entorno. “De hecho, hemos pedido oficialmente que cuando se complete la restauración, se nos ceda el uso del interior, para exposiciones y otras manifestaciones culturales”, explicó Heredia. Los vecinos llevan años esperando la desafección de la torre como patrimonio militar, para que se les concediera oficialmente el uso civil. “Lo cierto es que cuando era todavía de Defensa, pero estaba abandonada, los vecinos la utilizaron para sus actividades”, admitió Heredia. Este uso irregular fue cortado de raíz. La cesión a Costas y la rehabilitación del interior y el entorno puede dar carácter oficial y autorizado a ese uso vecinal. Heredia aprovechó para recordar que Costas tiene pendiente también en La Azohía el proyecto de retranqueo de la carretera de la costa para habilitar un paseo marítimo en condiciones. “Pero no tenemos ni idea de cuando se llevará a cabo”, confesó.
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http://www.elfaro.es/noticia.asp?ref=106789
Imagen de la histórica Torre de Santa Elena en la localidad costera cartagenera de La Azohía. (Foto: A. Aledo)
La Torre de Santa Elena, elemento defensivo y de vigilancia costera, desafectado por el Ministerio de Defensa y de indudable valor arquitectónico, será restaurado, así como su entorno, gracias a un plan de obras que supondrá la inversión de 650.000 euros a lo largo del próximo año 2009, según informaron fuente de la Demarcación de Costas, organismo que es el actual titularidad de su propiedad en nombre del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino, en la Región de Murcia, que es el actual titular de su propiedad.
El plan de actuación engloba diversas actuaciones destinadas a convertir esta torre militar de vigía en un enclave visitable que proporcione un paseo desde La Azohía y un lugar de esparcimiento y vista del paisaje marítimo circundante.
Se hará una adecuación del sendero de acceso, a la torre, que se mantendrá como peatonal, con pilotes y barreras móviles para flanquear el paso sólo a los coches y camiones autorizados, según explicó Francisco Peñalver, arquitecto encargado de la obra en la Demarcación de Costas.
El sendero, convenientemente acondicionado conducirá a la entrada de la torre, en la que está previsto instalar una nueva puerta. La adecuación de la fachada incluirá actuaciones tanto en el interior como en el exterior.
Por lo que respecta a la fachada, se ha decidido recuperarla tal y como era inicialmente, utilizando piedra y, sobre todo, material de recubrimiento en cal blanca, que en su mayor parte se ha desprendido. “Queremos ser fieles a la fisonomía original de la tierra, que además ha aguantado muchos años con ella”, según explicó Peñalver. Asimismo, se recuperará la escalera metálica del exterior del edificio.
Escalera de caracol
Por lo que respecta a la adecuación interior, se va a reacondicionar la escalera interior de caracol que brinda acceso a la parte superior de la torre, con ventanas-mirador al exterior. También se ha previsto recuperar la caseta anexa. El edificio brinda unas posibilidad de reutilización que están siendo estudiadas, “sin embargo, todavía no se ha tomado una decisión al respecto”.
De momento, se quiere recuperar este elemento por su valor arquitectónico y paisajístico y ya se verá si posteriormente se le da una utilidad más concreta”, apuntó Peñalver.
Por lo que respecta al entorno, la actuación más importante consistirá en la eliminación de un vertedero incontrolado de basuras y residuos que se ha ido formando, por el abandono de estas instalaciones, en los últimos años.
Única torre costera
La Torre de Santa Elena forma parte del grupo de edificaciones construidas entre los siglos XVI y XVII, a lo largo de la costa de la Región de Murcia, para alertar de la presencia de corsarios berberiscos, cuyas incursiones hacían necesario mantenerse alerta a todas las localidades costeras de Almería, Murc,ia y Alicante. Desde sus 70 metros de altura, esta torre fue una de las pocas cuya fisonomía permitió emplazar armamento defensivo y es, de hecho, la única que se mantiene en pie tan cerca de la costa.
La estructura hexagonal fue erigida con sillares de piedra, con cobertura de mampostería blanca. Una escalera de caracol interior permitía llegar a los diversos niveles superiores. Ya durante el siglo pasado se construyó una escalera metálica en el exterior. Tras décadas de abandono, el Ministerio de Defensa decidió traspasar hace algunos años la titularidad al de Medio Ambiente, que ahora abordará la restauración del edificio.
Los vecinos piden la cesión de uso cultural del edificio
El presidente de la Asociación de Vecinos de La Azohía, Juan José heredia, explicó que está puntualmente informado del proyecto de adecuación de la Torre de Santa Elena y de su entorno. “De hecho, hemos pedido oficialmente que cuando se complete la restauración, se nos ceda el uso del interior, para exposiciones y otras manifestaciones culturales”, explicó Heredia. Los vecinos llevan años esperando la desafección de la torre como patrimonio militar, para que se les concediera oficialmente el uso civil. “Lo cierto es que cuando era todavía de Defensa, pero estaba abandonada, los vecinos la utilizaron para sus actividades”, admitió Heredia. Este uso irregular fue cortado de raíz. La cesión a Costas y la rehabilitación del interior y el entorno puede dar carácter oficial y autorizado a ese uso vecinal. Heredia aprovechó para recordar que Costas tiene pendiente también en La Azohía el proyecto de retranqueo de la carretera de la costa para habilitar un paseo marítimo en condiciones. “Pero no tenemos ni idea de cuando se llevará a cabo”, confesó.
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