La escritora hispanocubana crítico a la dictadura castrista y dedicó su discurso a 17 bibliotecarios independientes en la cárcel por tener libros censurados por el régimen
Sábado 18 Octubre 2008
La XXVII Feria del Libro de Cartagena echó ayer a andar con el pregón pronunciado por la escritora hispanocubana, Zoe Valdés, que criticó abiertamente la dictadura castrista, que ha empobrecido la calidad periodística que caracterizó en otros tiempos a la isla caribeña.
Valdés dedicó sus palabras a los diecisiete bibliotecarios independientes, presos desde hace cuatro años y medio, por disponer en sus casas de un catálogo de libros censurados por el régimen.
La escritora también señaló que las palabras son el único poder que vale la pena hoy en día, si son auténticas y expresan los secretos artísticos, y cuando impregnan de sabiduría y de poesía a la vida, que es el poema más palpitante del universo.
Junto a la escritora, se encontraba al alcaldesa, Pilar Barreiro, la concejala de Cultura, Rosario Montero, y otros miembros de la Corporación Municipal, que hicieron un recorrido por las diferentes castas que componen este año la feria, instalada este año como novedad en pleno centro de la ciudad: en la calle del Carmen.
Numeroso público se congregó desde primeras horas de la tarde en esta calle peatonal para conocer las interesantes ofertas de los libreros y editoriales o participar en las diversas actividades organizadas alrededor de la muestra.
La alcaldesa se mostró satisfecha por el montaje de la feria en este nuevo emplazamiento, que en sus propias palabras ha venido a alfombrar de literatura esta calle en la que también se encuentra la escultura sentada de Carmen Conde en uno de sus bancos.
La iniciativa servirá para acercar la cultura a los ciudadanos al tiempo que dará vida al Casco de la ciudad, concluyó la alcaldesa.
Veintidós librerías locales y regionales, cinco editoriales y siete instituciones participan en este certamen, con una presencia destacada de la literatura infantil.
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