CALLE MAYOR

Guerra a la crisis

07.12.2008 - JOSÉ MONERRI


S i nos atenemos a los acontecimientos que se vienen produciendo recientemente, tendremos que afirmar que Cartagena está haciendo una profunda guerra a la crisis cultural. Porque hace una semana registramos la inauguración del Museo Nacional de Arqueología Subacuática (Arqua) con la presencia de la Infanta Cristina, y la concesión del XXIII Premio Internacional de Poesía Antonio Oliver Belmás, que recayó en Tomás Hernández Molina, galardón que otorga la Universidad Popular. Y si un certamen internacional tiene importancia, el abrir las puertas del nuevo Museo ha servido para poner de manifiesto que su aceptación ha sido extraordinaria a la vista de la afluencia masiva de visitantes. Son dos hechos que no pueden quedar sin reflejarse en las crónicas de la ciudad.
Pero en esta semana que ha finalizado ha tenido lugar la inauguración de la Biblioteca de Alejandría en el propio Palacio Consistorial, con concierto musical previo, y ofreciendo la contemplación de libros de autor de catorce países diferentes y también exposición cinematográfica. Se trata de un evento de primera magnitud desde el punto de vista internacional y que podrá disfrutarse hasta febrero.
A ello hay que agregar el hecho grato de que Sabic, la antigua General Electric, mantenga su plantilla pese a que las ventas no se han escapado de la crisis. Ello significa una tranquilidad para los setecientos trabajadores que componen la plantilla. Es una noticia positiva, que, gustosamente, recogemos por lo que significa para Cartagena.
Como también es positiva la de que las obras de la ampliación de la refinería de Escombreras no sufrirá ningún retraso aunque Repsol esté de actualidad por esas negociaciones de las que se habla con una empresa rusa. Los dirigentes españoles han informado que el Valle de Escombreras no se verá afectado negativamente por esa circunstancia, lo que viene a significar también una tranquilidad para quienes trabajan en esa ampliación.
Y como remate, no podemos olvidarnos de la puesta en marcha de la apertura oficial al tráfico de los nuevos carriles de la carretera que une el Valle de Escombreras con los enlaces de la autovía Cartagena-Murcia y la autopista Cartagena-Alicante. Aparte de las grandes mejoras que ello supone para el intenso tráfico, la mayoría de camiones que van cargados de mercancías petroquímicas, ello supone también un notable desahogo para el pueblo de Alumbres.

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