Barcelona 24-07-2011. Decía Rafael Ribó (otro vividor de la Política, “defensor del Pueblo” en Cataluña) en el Parlament por el 82 cuando el caso Banca Catalana; “¿Quién ha presionado al presidente de la Generalitat?, ¿cómo lo ha presionado?, ¿sobre qué materias le han presionado?”, “no podemos tener un presidente presionable”. Pag. 89 de "Barcelona, 30 años de Corrupción".
Me lo recuerda hoy La Voz de Barcelona;
‘En 1982, cuando el imputado Jordi Pujol se vio en peligro (porque el Ministerio Público le imputó algo más que tres trajes) se convocó al pueblo soberano para que resolviera en las calles lo que se elucidaba en el juzgado, aquella manifestación inolvidable que fue acto fundacional de la putrefacción catalana’
Redacción
Sábado, 23 de julio de 2011 | 11:37
Arcadi Espada, periodista y profesor universitario, este sábado en un artículo publicado en El Mundo”
Han pasado 30 años de la intervención de Ribó en el Parlament, y por los vaivenes de la extraña Democracia, más papanatismo, que padecemos, de nuevo en el Gobierno el Gran Charlatán de su peculiar e interesado catalanismo; porque no nos engañemos “quien manda es él”… con su “agenda” donde constan catalogados y medidos sus acólitos al mando.
Condenados por extorsionar (y más delitos) mis amorales ex abogados Juan Piqué Vidal (el suyo en el caso Banca Catalana) y el ex juez Luis Pascual Estevill, elevado por Pujol a la Academia de Jurisprudencia de Cataluña y al CGPJ... una de dos, o mis dos ex abogados extorsionaban a Jordi Pujol, o juntos formaban parte de la selecta burguesía o “mafia” catalana repartiendo en Suiza. En treinta años han desaparecido billones con B de pesetas en Cataluña, y mis ex abogados presentes o autores en gran parte de la inmensa suma.
Considerando que Piqué Vidal sigue en activo con un bufete de 50 profesionales, que domina varios de los casos de corrupción en Barcelona (Félix Millet con la Garicano cuñada de Rafael Ribó, de los 400 de toda la vida) me pregunto que canales utilizarán para no hablarse jamás pero hallarse en permanente contacto y entelequia. Hubo un tiempo, los 2000, que el correveidile era Antonio, el hermano mayor de Javier de la Rosa Martí, que cobraba de la Generalitat sin presencia ni cargo controlable.
¡Ubinan gentium sumus! ¡Menudos “gentium” nos gobiernan! O más sencillo en puro castellano “dime con quien andas…”
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