04/12/2008
Diez inmuebles recibieron este galardón que supone un reconocimiento a aquellos edificios con más de 15 años que han mantenido sus características iniciales a pesar del paso del tiempo
El consejero de Obras Públicas y Ordenación del Territorio, José Ballesta, hizo entrega de los III Premios a la Calidad en la Edificación de la Región de Murcia, que la Consejería organiza en colaboración con el Colegio de Arquitectos y Aparejadores de Murcia y que suponen un reconocimiento a aquellos inmuebles con más de 15 años de antigüedad que han mantenido sus características iniciales a pesar del paso del tiempo. Al acto, celebrado en la Consejería de Obras Públicas, asistieron también el presidente del Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de la Región de Murcia, Antonio Garrido Hernández; el presidente de la Federación Regional de Empresarios de la Construcción de Murcia, Fulgencio Belando Aragón; y el presidente del Consejo Territorial de Caja de Ahorros del Mediterráneo, Ángel Martínez Martínez, entre otros. Diez inmuebles recibieron este galardón que, según el consejero, “nos llevan a diversos puntos de nuestra geografía regional y suponen el reconocimiento de una arquitectura bien pensada y llevada a cabo”.
Ballesta indicó que “un ejemplo de esto es el Palacio de los Fajardo de Cehegín, uno de los edificios más notables del casco antiguo del municipio, que recibe una distinción por haber servido a tres usos tan distintos como residencial, administrativo y turístico”. En la categoría de uso Residencial se premió al edificio situado en el número 5 de la Plaza San Julián de Murcia, por haber superado el paso del tiempo manteniendo sus funcionalidades y calidad original. Dentro de esta misma categoría el jurado también decidió entregar tres menciones: al número 1 de la calle Serrano Alcázar de Murcia, por conservar sus cualidades materiales y funcionales sin ningún tipo de enmascaramiento superficial, aportando belleza y notoriedad en el centro de la ciudad; al edificio Puerto Bahía de Puerto de Mazarrón, por mantener sus características intrínsecas, conservadas aún con el paso del tiempo, en un entorno tan complejo como es el de la costa; y al Palacio Vinadel de Murcia, por la adecuación de un edificio de vivienda en un antiguo palacio sin pérdida de la belleza formal de la fachada. En el apartado que premia las edificaciones de uso Institucional resultaron galardonados el Palacio Aguirre de Cartagena, por haber mantenido su carácter de icono modernista de la ciudad portuaria durante casi un siglo, y la Sede del Colegio Oficial de Arquitectos de Murcia, por su capacidad de adaptación al cambio de usos, manteniendo la emblemática figura que representa su posición e historia en la ciudad. El inmueble que es sede del Banco de Valencia en la calle Trapería, número 7 de Murcia, recibió también una mención dentro del apartado de las edificaciones de uso Comercial, por la nobleza de su imagen, que la convierte en un hito referencial de la ciudad, como consecuencia del alto nivel de mantenimiento programado en los últimos años. En cuanto a los edificios de uso Turístico recibieron sendos galardones el Hotel Entremares de la Manga del Mar Menor, por su capacidad de adaptación a los nuevos tiempos, y el Hotel Cenajo de Moratalla, por la exquisitez del cuidado en la recuperación de la construcción, cambio de uso y adaptación a su entorno inmediato. Por último, José Ballesta entregó el premio a la Labor Profesional, que este año ha recaído en el arquitecto técnico Francisco García Olmos por su contribución al desarrollo de la calidad en la edificación regional. Un jurado de reconocido prestigio El objeto de estos premios es el fomento de la calidad en la edificación, viéndose reforzada esta iniciativa con la reciente aprobación de la Ley para la Calidad en la Edificación en la Región de Murcia, en la que se establecen las normas básicas que deben garantizar la dignidad, adecuación y durabilidad de nuestros inmuebles, así como las previsiones para la gestión y el aseguramiento de los mismos. El jurado de esta tercera edición de los Premios de Calidad en la Edificación ha contado con representantes del Servicio de Gestión de Calidad en la Edificación de la Comunidad Autónoma, del Colegio Oficial de Arquitectos, la Federación Regional de Municipios, el Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos, el Instituto Eduardo Torroja de Ciencias de la Construcción (FRECOM), que por primera vez ocupa una vicepresidencia, el Colegio de Administradores de Fincas, el Centro Tecnológico de la Construcción y la Federación Regional de Empresarios del Metal. El galardón otorgado en estos premios consiste en una escultura del artista Manuel Mateo, con cortados de roca viva en su base y con estructuras arquitectónicas en su parte superior que, según el autor, ganador de numerosos premios nacionales e internacionales en distintas disciplinas artísticas, asemejan las estructuras de mayor calidad arquitectónica de Cuenca, su ciudad de origen.
